21 ago 2008

ASÍ SON LAS COSAS...

Platicando con una amiga hace unos momentos llegué a una quizá no tan difícil semi conclusión. No lo asevero pero tiene mucho de cierto con lo que siempre nos sucede en la vida: Las Pérdidas.
Siempre, casi siempre estamos perdiendo, si no es que siempre, pero dejemos el casi por aquello de las equivocaciones justificadas.
Dejamos el vientre materno y eso nos produce una pérdida... de la comodidad y seguridad para enfrentarnos a la realidad de la vida. Ahora semi comenzamos a vivir por nostros mismos, nos otorgan la responsabilidad de "respirar"
Dejamos de ser niños para adentrarnos a la adolescencia y eso nos produce un gran dolor como su propia definición nos dice... es cuando muchos perdemos la inocencia. Digo, algunos mucho antes de siquiera tener la edad en la que se marca la adolescencia.
Dejamos de ser adolescentes para ser adúltos jóvenes, cada vez vamos perdiendo más cosas, ya perdimos la inocencia, ya muchas veces perdimos la capacidad de asombro y eso sí está cabrón. Ya no nos reímos con cualquier cosa. En esta etapa, muchos pierden su virginidad...
Y seguimos con las pérdidas... pero sí, quizá ganamos muchas cosas o nos conformamos por perder las pasadas.
Perdemos amigos, dejamos actitudes, crecemos sin remedio, envejecemos sin opción y vamos perdiendo fuerza con el tiempo.
Perdemos novias, familia, padres, mascotas, juguetes, recuerdos, sentimientos, apuntes escolares, fotografías, momentos, risas; y casi siempre tenemos la tristeza de lo que nos produce haber perdido todo eso y algo más que no sabemos.
Perdemos tiempo en pendejadas, en dormir, en regañar, en pensar, en estar sentados, en escribir, en enojarnos...
Perdemos las ganas, la vitalidad, la virilidad, la capacidad de procrear, los reflejos, la capacidad de retención, la vista, el cabello negro.
Perdemos (la mayoría) las ganas de vivir, de socializar, de desvelarnos, de viajar, de sentarnos en el patio o jardín porque ya nos da frío salir.
Nos perdemos de la oportunidad de vivir con alguien o algo porque siemplemente no tenemos los mismos intereses o porque nacimos años antes o años después. Pero sí es cierto, no se pierde lo que jamás se ha tenido.
Esto es vida, pérdidas irremediables, ganancias que sustituyen.
"Me perderé toda mi vida por no poder disfrutarte como quisiera" (DAR)
Y bueno, venga, ¿Qué ganamos?, Sin duda también lo hacemos.

17 ago 2008

El Mareo, Bajofondo Tango y Gustavo Cerati.






















Una rola muy recomendable: El mareo, con Bajofondo Tango Club y Gustavo Cerati. Genial.

EL MAREO
Avanzo y escribo, decido el camino, las ganas que quedan, se marchan con vos.
Se apaga el deseo, ya no me entreveo, y hablar es lo que sé, me va mejor.
Con los ojos no te veo, sé que se me viene el mareo y es entonces cuando quiero salir a caminar.
Con los ojos no te veo, sé que se me viene el mareo y es entonces cuando quiero salir a caminar.
El agua me ciega, hay vidrio en la arena, ya no me da pena, dejarte que un adiós.
Así son las cosas, amargas borrosas, son fotos veladas de un tiempo mejor.
Con los ojos no te veo, sé que se me viene el mareo y es entonces cuando quiero salir a caminar .
Con los ojos no te veo, sé que se me viene el mareo y es entonces cuando quiero salir a caminar.
El aire me ciega, hay vidrio en la arena, ya no me da pena dejarte un adiós.
Así son las cosas, amargas borrosas, son fotos veladas de un tiempo mejor.
Con los ojos no te veo, sé que se me viene el mareo y es entonces cuando quiero salir a caminar.
Con los ojos no te veo, sé que se me viene el mareo y es entonces cuando quiero salir a caminar.

12 ago 2008

Beijing 2008






Los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 84, son mis primeros que recuerdo haber visto, aunque no con mucha atención y con la mirada y entender de un niño de ese tiempo y edad.



Recuerdo que mi madre siempre veía la inauguración y cada cuatro años sería (casi) una constante. A mí me parecía aburrido claro está, ya que como niño quería jugar o ver caricaturas. En aquellos años, los canales de caricaturas en la televisión no eran muchos y la señal se interrumpía para dar foro a los Juegos Olímpicos.

Al pasar de los años, obviamente mi interés por ver los juegos creció y fue "normal".

Han pasado 7 Juegos Olímpicos desde entonces y de los que recuerdo: Los Ángeles 84, Seúl 88, Barcelona 92, Atlanta 96, Sidney 2000, Atenas 04 y Beijing 08. Entre ellos claro está, también los Juegos Olímpicos de Invierno.

Esta fiesta deportiva me gusta por algunos deportes que son espectaculares sin duda alguna y muestra la preparación física de todos los deportistas participantes, pero también evidencia la total mediocridad de algunos.

Nuestro país, por donde quiera que se le vea, no es potencia en ninguna prueba. No somos (como país obvio) un dolor de cabeza que genere a los países que están en alto nivel de competencia en casi todos los deportes. No sé porqué no somos buenos ni siquiera en fútbol, sabido que es el deporte que más se practica y supuestamente a nivel profesional, pero si en los mundiales no se figura más allá de octavos de final, mucho menos en otros deportes como la natación.

No quiero "desmeritar" los esfuerzos de unos cuantos deportistas que "quizá" se rajan la madre realmente por tener un nivel competitivo, y por supuesto, mi admiración para aquellos que han ganado una medalla, sea de bronce, plata u oro.

Pero el objetivo de mi blog no es ese.

Para nadie (quiero creer) es desconocido el nulo apoyo al deporte "amateur", la mediocridad de nuestros gobernantes y quienes encabezan el Deporte Mexicano. ¿Cómo esperar que del canotaje se pueda vivir en México si hay alrededor de 45 millones de pobres en la actualidad?

Generalmente, nuestros campeones mundiales de box o marchistas han surgido por la necesidad, por el hambre que sufren, porque ven en ese deporte un posible desarrollo semi profesional en el que pudieran ganar un dinero que sus nulos estudios no le darán.

Hay porqués de origen, entre ellos, en nuestra educación básica.

La educación física en nuestro querido país México no existe como tal. No hay un buen plan de desarrollo en las escuelas que nos permita descubrir más deportes o el interés por practicarlos, no hablemos de instalaciones porque obviamente las escuelas no cuentan con ello; sólo fútbol, básquet bol y el volibol que es un híbrido con la cancha de básquet. En nuestras escuelas sólo contamos con "Maestros (disque) de Deportes". Son esas personas que a sus "alumnos" los ponen a correr dos vueltas a la cancha, estiramiento, a veces lagartijas y sentadillas y ya. "Aquí está el balón de fútbol, de básquet o de voli, pónganse a jugar el resto del tiempo" ¡Jajajaja! El calentamiento a penas duró 5 minutos. Desde ahí comenzamos a no tener el hábito deportivo, quienes lo desarrollan son muy pocos.
¿MEDALLAS DE BRONCE QUE SABEN A ORO?
Sí, no ha de ser fácil ganar una medalla en unos Juegos Olímpicos, sobre todo por la calidad de los deportistas contra los que hay que enfrentarse y por la poca preparación que tienen los mexicanos. Pero: ¿Aspirar a una medalla de bronce como máximo? ¿En verdad, sólo se puede tener como meta adquirir una medalla de bronce, un tercer lugar? Esto de alguna manera me parece mediocre insisto. Nuestro deporte entonces no está en calidad de competencia de unos Juegos Olímpicos. ¿No se puede hacer más por el deporte? ¿Realmente no se puede destacar?
¿Qué nos hace falta o qué es lo diferente entre un atleta mexicano y un chino? ¿La alimentación, la mentalidad, el apoyo, las instalaciones, la cultura, la preparación? Entonces, ¿Para qué nos jactamos de decir que tenemos atletas que van a los Juegos Olímpicos a poner en alto el nombre de nuestro país, si lo que realmente van a exponer, es la falta de apoyo gubernamental y preparación (profesionalismo) total? ¿Merecemos un tercer lugar? ¿Sí somos todos unos tercermundistas en vías de desarrollo, no sólo económico, sino deportivamente?
Todo tiene que ver, absolutamente todo, desde las ganas personales por sobre salir, hasta los apoyos, instalaciones y entender que el deporte es una inversión, reflejo de un país. Los gobiernos no quieren ver esto, y tal vez consideran que es un gasto innecesario. Al menos, (si me equivoco) es lo que en mi particular punto de vista me han dejado ver.
Sin duda, estamos muy lejos, pero muy lejos de llegar a ser un país competente a nivel mundial.
Muy lejos estamos siquiera de destacar en el rankin número 15 de medallas ganadas en unos Juegos Olímpicos; digo, eso es soñar bastante, me parece más que utópico.
Aquellos deportistas que se ganan participar en los Juegos Olímpicos ha sido por sus propios méritos. Las becas deportivas la verdad son mediocres. No cuentan con sus elementos. Esto me hace recordar por ejemplo, que a Belem Guerrero Tv Azteka le tuvo que patrocinar la bicicleta porque la mujer no tenía lana para adquirirlo y ni cómo chingaos pensar en la CONADE para que la apoyara. Esta ciclista, se hizo porque todos los días tenía que trasladarse de su casa a su trabajo. ¿Necesidad convertido en gusto, o deporte?
Sólo se puede pretender vivir del maldito y mediocre fútbol en México... qué hueva la neta. Salarios súper inflados que hacen de una profesión también una mediocridad. Esto no estaría tan mal visto, si realmente fueran buenos. Diría un comercial: "Somos 11 mil millones de mexicanos y no podemos encontrar a 11 que sean buenos?" Genial.
Si lo que hace falta es entrenar 24 horas al día, pues que se haga. Si Phelps es mucho mejor que Veloz porque hace yoga 3 horas, pues que le copie.
Muchos de los deportistas mexicanos que han logrado algo realmente importante ha sido por sus propios méritos, no porque le deban el apoyo real a un gobierno o la CONADE.
En fin, me pasaría escribiendo mucho sobre esto y sería tema de discrepancia entre todos, cosa que me alegraría realizar.
Para finalizar, mi propuesta sería que desde las instituciones educativas se impartiera bien un deporte a escoger, que formara parte de las materias a cursar obligatoriamente, tal cual lo hacen en las escuelas en los Estados Unidos. Hay que copiar lo bueno, siempre lo bueno y tratar de perfeccionarlo.
No podemos seguir mendigando medallas de bronce por siempre, la neta, da pena, aún con todo y que Paola Espinoza me guste (!jejejeje¡) y hayan tenido una participación mediana. Al ver la repetición de los clavados sincronizados, me di cuenta que no fueron tan, tan buenas, las otras fueron peores. ¿Mal no? ¿Esperar a que el otro cometa un error para ganar, porque uno ya no puede hacer más, pues como que no o sí?
Apoyo al deporte señores, sin más. Así tal cual, hay que invertirle y no hacer de mártires, héroes nacionales.
El fútbol no lo es todo, aunque sí, ser bueno para las patadas es mejor que tener una licenciatura o doctorado. Pero pues a nivel mundial, no se refleja nada de lo disque bueno que son los futbolistas. Que pena.


7 ago 2008

10 AÑOS

A veces no siento que haya pasado tanto tiempo, pero el calendario y los años no me dejan mentir y menos perderme en la fantasía de que no ha pasado tanto.
Tenía 21 años cuando en 1998 dedidí venirme a Morelia.
Esta semana se cumplen exáctamente 10 años de mi arribo como estudiante a esta ciudad de la cantera rosa.
Aún recuerdo el fin de semana antes de entrar a clases. Varios amigos y sus respectivas nos fuimos a la isla de Yunuen en Janitzio donde pasamos una buena peda. Fue la primer vez que me perdí en la borrachera. Jugamos ping-pong demasiado divertidos y chupando hasta que los reflejos no dieron para más. La experiencia fue chida.
El primer día de clase llegué tarde. Un amigo había quedado de pasar por mí para que no llegara solo y el güey se tardó, por lo que yo llegué demorado.
Recuerdo que ya todos mis compañeros estaban dentro del salón de clase, asunto que no me asustaba, pero sí quería llegar a tiempo para ir viendo dónde madres me iba a sentar y con quiénes compartiría clases. Pero no fue así, tuve que tocar la puerta, entré y obviamente todos los del salón voltearon a ver quién jodidos faltaba de ser su compañero. Nada qué escoger, sólo quedaba una sola silla donde podía sentarme y esa estaba hasta el otro lado del salón, así que tuve que pasar por enfrente de todos; fue medio incómodo, pero ni modo.
Esos primeros días de introducción, recuerdo que no fueron del todo gratos, no tenía amigos y apenas platicaba con algunos de ellos.
En el curso de inducción a la Biblioteca, me hizo plática Marcela, quien me decía: "Te veo que sales del salón y solo, entras y solo, siempre solo, por qué".
En fin, muchas cosas han sucedido en 10 años que llevo viviendo aquí. Se dice que para ser ciudadano de un lugar, por lo menos tienen que pasar 10 años de residencia, cosa que a mí realmente me tiene sin cuidado, pero me doy cuenta que 10 años realmente son un chingo. Ahora estoy en los 31, cuando a mis 21 era todo un chamaco, aunque ya era la mayoría de edad en todo mundo. Era de los más grandes de los compañeros, como dos eran los más grandes y algunos menores a mí por un año o la misma edad, pero casi todos tenían 18 años.
Viví en casa de Humberto, él me hizo el paro de recibirme en su casa cuando yo aquí no sabía bien ni qué onda. Vivía lo más cerca que estuve de la Universidad, sin embargo, no sé del todo por qué me despertaba a las 5am para bañarme e irme a la escuela si entraba a las 7:00am y estaba más cerca; me hacía como 15 min máximo. En fin, un día Hugo, hermano de Humberto me dijo que sería cuestión de agarrarle la onda y que luego media hora bastaría para estar listo e irme a la uni.
En estos díez años, he tenido la fortuna de haber conocido a tres de mis grandes amigos, considerados hermanos. Formamos un gran equipo de trabajo y estudio y la neta se les quiere un chingo cabrones... Jairo, Beto y Bernardo. A ellos gracias por tenderme la mano y recibirme en su casa. De hecho, los considero mi familia en Morelia. Cuando yo llegué aquí, nadie de mi familia estaba como para haberme refugiado con ellos; realmente llegué con los amigos de Zitácuaro de toda mi vida, pero tuve que comenzar de cero y abrirme paso con mi nuevo círculo de amistades por realizar.
No sé cómo agradecerles estos 10 años de amistad, pero realmente espero ser un buen amigo así como ustedes lo han sido conmigo.
Cómo olvidar aquellos días de disque amenazas de boma en la uni que terminamos "festejando" en el depa de Cosmos... jajajajajaja, buenas prácticas ¿Qué no Beto? y te rayaste esa vez ¿no Jacko?... pobre tigre del cobertor, hasta hizo biscos jajajajajaja.
10 años de iniciar en el chupe oficialmente... jajajaja. (con moderación)
Si hubiese tenido un bebé a mis 20 ó 21 años, ahora tendría 10, ¿bastantes no?, tendría quizá 10 años de casado, 10 años trabajando, 10 años de que no sucedió nada de lo que ahora son recuerdos totalmente gratos.
Quizá sería bueno festejar los primeros 10 años de estar aquí y de haber conocido a la gente que ahora tengo la fortuna de contar con ellos.
Sin duda gracias, la montaña de recuerdos de estas 10 primaveras creo que es compartida por ustedes.
Han sido sin duda un reto en todo sentido, que quizá muy pocos sobreviven a lo que yo viví, pero con ganas y decisión todo se puede.
Aprendí a valorar no estar en la comodidad de mi casa, a dormir en el suelo cuando me salí de la casa de Humberto para irme a Los Pinos y luego a Cosmos. Viví las carencias de la comodidad, de bañarme con agua siquiera tibia, de contar con un vehículo para ir a donde fuera, de llegar a la casa y que alguien me esperara. De no tener ni dónde concinarme un mísero huevo, ni poder tener leche o jamón para un sandwich porque no había refrigerador. No había tele, sólo una grabadora que no funcionaba del todo bien y el radio era lo único que escuchaba. Esas tardes de soledad forzoza, cuando me salía a la tienda de la esquina a comer porquería sentado en la banqueta pensando en la necesidad de estar mejor.
Recuerdo que despertar para bañarme era lo primero que no quería hacer, puesto que el agua estaba demasiado fría... era enero, y yo, pues tenía que asearme así quisiera o no. Tengo quizá el trauma de no poder salir de casa sin bañarme a la hora que me levante de la cama. Me volví resistente y me acostumbré a bañarme con agua realmente fría.
Bien dicen que la necesidad es lo que hace salir adelante.
Luego vinieron los momentos de gloria del Amanecer... llegar a una casa que lo tenía todo, por la módica cantidad de 100 pesos mensuales era un súper lujo que no cualquiera. Cuarto para mi solo, cocina, etc, era lo mejor y lo más chido es que me la habían ofrecido a tan bajo precio, prácticamente para cuidarla. Eso sucedió en el 2 mil a mi regreso de mi primer viaje a Alaska.
Ahora en 10 años, los amigos han aumentado y eso es chido, realmente cuento con verdaderos amigos y amigas, pero la familia sigue siendo la misma, sólo creció.
Que fortuna verlos envejecer cabrones, aunque voy adelante en años, algunos ya se ven más jodidos que yo eh güeyes... jajajaja.
Quizá este tiempo amerita que escriba algo mucho más largo y entretenido, o simplemente algo mejor que merezca el cumplir 10 años y que mis casi nulos lectores (cosa que agradezco) digan: "ahh que chida forma de plasmar los 10 años que éste cabrón cumple en Morelia", pero pues no, esto es lo que es y así será jajajaja; es lo que me va naciendo en este mismo instante en que me puse a escribir.
Sin duda se me olvidan muchas cosas, pues es bastante tiempo para poder redactar mil anécdotas, pero no sé, aquí quiero terminar...
"Gracias Totales" (DAR.)
A cada uno de ustedes (quienes saben quién son lo aseguro) por contribuir a este décimo aniversario.
Gracias brother`s, sister´s, vida, madre, hermano, cuñada, padre (qed), tía... Alaska, gracias.
ATTE. Ra

1 ago 2008

TOTAL, QUÉ MÁS DA...

Qué bonito es... agradable.
Todos buscamos un por qué, pero ¿para qué?
Ha sido aburrido, largo, triste, chido, desestrezante, imaginativo, relajante... hasta desesperado y hasta quizá extrañable.
No he visto muchas caras conocidas, de hecho no todas se encuentran en este lugar. Algunas ni las he querido buscar.
Todo casi siempre pasa en el último momento, y siempre me pregunto ¿por qué hasta entonces?, tal vez así deba ser, y eso es lo chido, que me quedo con ganas para seguir buscando.
Inicio desde el principio entonces, pero luego me doy cuenta de que fue en medio de la historia.
No me he movido mucho, incluso, he dejado de escribir... pero he pensado infinidad de temas, de relatos, de momentos, de pláticas que quisiera relatar; pero luego al frente del monitor me resisto... no quiero la misma historia.
Ahhh, esas burbujas raspan en la garganta suavemente el pasar, en el trago amargo pero luego es y será diferente.
Hay y no motivos pero es lo de menos el chiste es hacerlo o no; yo sí lo hago, total.
Lo he perdido, pero (como todo en la vida existe) qué más queda por hacer si lo posible se realizó en el intento de lo imaginable en el momento adecuado o en el segundo pensado... naaaaa, qué más dá... total, la resignación no tiene opción, simplemente es.
Algunos me preguntan, otros omiten, yo, me sigo contestando.
No es nada por decir o mucho por callar, todo mientras encuentre salida me apetece.
Todo mientras pueda y busque, quiera y sienta tiene sentido por sí solo; lo demás se existe.
Ya me largo porque divago, ya me voy porque no callé nada y conté poco.
Pasaron 1o días hábiles... hay que regresar, ni modo, nada es para siempre.