13 may 2008

Detente no me mates...


"(...) Detente no me mates, detente no me mates, soy un mosquito bilíngüe.

Detente no me mates, detente no me mates, yo sé leer y voy a ayudarte (...)


Decía esa canción del desaparecido grupo Flans en la década de los 80´s si no me equivoco.

Sin embargo, nunca he coincidido con no matar a un desgraciado mosquito.

Ayer en la noche, varios de ellos me estuvieron chingando durante todas las horas en que supuestamente tengo que dormir y descansar. Pero bien que lograron que la pasara mal.

Le sumo que en estos días ha hecho un pinche calor mal plan, que me la paso sudando carajo y no puedo dormir, si normalmente tengo problemas para conciliar el sueño, más con el nefasto calor y con unos pinches mosquitos desgraciados rondando por mis oídos.

No puedo dormir con mucho ruído, casi cualquier cosa me despierta o ayuda a que no concilie el sueño rápido. No puedo dormir con ninguna luz prendida, necesito casi el 100 por ciento de oscuridad. No puedo dormir cubriéndome toda la cabeza, necesito estar respirando aire nuevo, por lo que la nariz es necesario que tenga un hueco para poder respirar bien. Pero, con estos pinches moscos, no puedo cubrirme con las cobijas porque me dá mucho calor, comienzo a sudar, no puedo conciliar el sueño, me dá sed, me desespero y todo pasa menos dormir... pinches moscos. Cuando me han colmado la paciencia, me levanto de la cama todo encabronado a buscarlos. Prendo la luz y en lo que mis ojos se acostumbran al destello después de intentar dormir y tenerlos cerrados, cuando los localizo disfruto de matarlos o intentar matarlos, porque no a todos los llego a matar; pero los mato con una saña, tal cual fuese un asesino, pero de hecho, lo que intento es desquitarme y darles su merecido... (toma perro, cabrón, pa´qué me andas chingando) jajaja, como si deberas.

Y todo pasa, lo mato o los mato, apago la luz, estoy más agitado que antes, con más calor que antes, más encabronado que antes, más tarde que antes, sudando más que antes, más despierto que antes, que cuando me acuesto supuestamente ya solucionado uno de los problemas de mi insomnio, !zaz¡; otro pinche mosco llega supuestame de la nada y con él, unos más. ¿Levantarme de nuevo a matarlos?, ni madres, mejor que me piquen, luego me vengaré... ¡ya verán al rato malditos ojetes, la venganza es dulce!

¡Cómo extraño mis noches de frío!

2 comentarios:

Ana dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Ana dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.